Tres cosas para no vivir más en oprobio

TRES COSAS PARA NO VIVIR MÁS EN OPROBIO

“Vosotros veis el mal en que estamos, que Jerusalén está desierta… No estemos más en oprobio”(Nehemías 2:17-18).

Quizás hemos visto que en la ciudad donde vivimos hay mucha maldad, pero no nos hemos resignado al mal. De hecho, en lugar de resignarnos, hemos abierto cientos de Casas de Paz en nuestra ciudad para darle esperanza a las personas.

Hoy quiero compartirles tres cosas que debemos hacer por nuestra gente y por nuestra ciudad.

“Entonces les declaré cómo la mano de mi Dios había sido buena sobre mí, y asimismo las palabras que el rey me había dicho. Y dijeron: Levantémonos y edifiquemos. Así esforzaron sus manos para bien”(Nehemías 2:18 RV60).

1.- Recordemos que Dios ya nos ha ayudado en el pasado.

Nos ha respaldado para restaurar miles de familias, a construir un templo, nos ha dado un Monte de Oración, milagros y sanidades, etc.

2. Levantémonos y edifiquemos una vez más.
Quizás habías dejado de servir con la pasión que lo hacías antes. Envuélvete una vez más. Acércate al Padre una vez más.
Quizás habías pecado o fracasado en algo recientemente. Levántate una vez más y arregla la situación.

3. Hagamos un esfuerzo.
La gente mala se esfuerza por hacer cosas malas.
Los hijos de Dios nos esforzaremos para establecer su Reino y ayudar a cientos de personas a conocerle.

“Así esforzaron sus manos para bien”(Nehemías 2:18).

Asiste a la iglesia el domingo.
Memoriza un versículo a la semana.
Lee un devocional diario.
Invita a un amigo a la Casa de Paz.

Piénsalo:
¿Qué milagros, respuestas, o favores de parte de Dios necesitas recordar?
¿Qué esfuerzo necesitas hacer para ya no vivir en oprobioy ayudar a otros a vivir mejor?