EL VERDADERO ARREPENTIMIENTO
La Biblia dice que todos hemos pecado y que, para obtener perdón de pecados, necesitamos arrepentirnos de nuestros malos caminos y entregarle nuestra vida al Señor para que Él nos ayude en nuestras debilidades.
Muchas veces pensamos que nos hemos arrepentido, pero seguimos haciendo las mismas cosas que desagradan a Dios. Necesitamos evaluarnos y ver si realmente hemos tenido un verdadero arrepentimiento o si ha sido pura emoción y religiosidad. Para ello tenemos que comprender la diferencia entre falso arrepentimiento y verdadero arrepentimiento.
1.- LO QUE NO ES EL ARREPENTIMIENTO.
No es sentirnos culpable por algo que hicimos mal. La culpabilidad en respecto a los pecados cometidos, viene antes del arrepentimiento, pero no es arrepentimiento en sí. De hecho, la culpabilidad no proviene del Señor, es una atadura que el enemigo usa para torturar a las personas, y para nosotros que creemos en Cristo no existe la culpa.
2.- LO QUE ES EL VERDADERO ARREPENTIMIENTO.
La palabra arrepentimiento viene de otras dos palabras: “EPISTREFO” lo que significa, “volver, y dar media vuelta”. “METANOEO” lo que se refiere a cambiar la mente.
Arrepentirnos es apartarnos y aborrecer el pecado. No es suficiente confesar el pecado; es necesario apartarse de él, y ya no cometerlo, ejemplo: Si un ladrón está realmente arrepentido, va a devolver voluntariamente lo que robó. Si un mentiroso está arrepentido, rectificará sus mentiras y hablará la verdad.
El arrepentimiento es cambiar la forma de pensar (Romanos 12:2) y no sólo la manera de pensar, sino también la manera de actuar. Es enmendar el error que cometimos. Una persona verdaderamente arrepentida trata de reparar cualquier daño o de pagar cualquier deuda que deba. Un ejemplo de esto es Zaqueo quien dio de regreso cuatro veces más que lo que él había tomado.
Piénsalo:
¿Estás en una situación donde sabes que debes arrepentirte de algo delante de Dios?
¿Qué significa el verdadero arrepentimiento?