La casa del perezoso

LA CASA DEL PEREZOSO

“Pasé por el campo de un perezoso, por el viñedo de uno que carece de sentido común” (Proverbios 24:30 NTV).

No importa que proyecto le des a una persona perezosa, esta nunca hará florecer lo que se le entrega. El holgazán no multiplica, no prospera, no termina sus estudios, no abre su empresa propia, tiene buenas intenciones, pero le falta disciplina y buen sentido común, deja sus proyectos a la mitad, se da por vencido a las primeras señales de dificultad, no lucha por su hogar ni por su ministerio. Le da igual todo porque le falta pasión.

¿Qué le sucede al perezoso?

“Vi que habían crecido espinos por todas partes. Estaba cubierto de maleza, y sus muros destruidos” (Proverbios 24:31 NTV).

1.Le crecen espinos en su casa. Los espinos no son bonitos, no son cómodos. Representan algo que ahoga las buenas plantas. Los espinos ahogan los matrimonios, la salud, los ministerios, las finanzas y las vidas productivas.

“Otras semillas cayeron entre espinos, los cuales crecieron y ahogaron los brotes” (Mateo 13:7 NTV).

2. Le crece maleza en su casa. La maleza se refiere a plantas que no dan fruto. Una persona perezosa no prospera en lo que hace. Es mediocre en su trabajo, pierde empleos y oportunidades de negocios propios.

3. Sus muros son destruidos. Generalmente la gente perezosa vive con sus muros financieros destruidos, pasa muchas necesidades, incluso su salud mental y física muchas veces es afectada por el estrés causado por la falta de recursos.

“Entonces la pobreza te asaltará como un bandido; la escasez te atacará como un ladrón armado” (Proverbio 24:34 NTV).

Piénsalo:

¿Qué tipo de casa tienes?
¿Qué tipo de persona eres?