LAS ESTACAS…
Primero, vemos en este pasaje que Dios nos anima a ensancharnos y a extendernos.
En segundo lugar, nos habla de reforzar para poder crecer.
Cuando se trata de construir un edificio encontrarás que entre más alto sea este, más tendrás que reforzar los cimientos. Entre más lejos quieras llegar en la vida, entre más grandes sean tus sueños, más reforzado tendrán que ser tus cimientos, tus valores y tu fe. Si no tienes fundamentos fuertes es posible que no puedas soportar las presiones y las tentaciones que vienen juntamente con el éxito.
He aquí algunas estacas que debemos reforzar antes de extendernos:
1. La estaca de la oración.
Alguien dijo: mucha oración, mucho poder; poca oración, poco poder; no oración no poder.
2. La estaca de la Palabra.
Es la guía y la luz en las decisiones que tomamos diariamente.
3. La estaca del servicio.
Nunca dejemos de servir, esto nos mantendrá humildes y enseñables, porque quien deja de aprender deja de crecer.
4. La estaca de ser enseñables.
Quien deja de aprender, deja de crecer. Recuerda que lo que Dios tiene para ti es más grande que tus caprichos o pensamientos limitados.
Piénsalo:
¿Cuáles de estas estacas que acabamos de mencionar necesitas volver a reforzar?
¿Qué tan grande son tus sueños? ¿Qué tan fuertes están tus estacas?