TENEMOS EL MISMO TIEMPO
La diferencia entre los exitosos y los mediocres tiene que ver en cómo usan su tiempo. Todos tenemos el mismo tiempo, pero de esos hay unos que fracasan y otros que tienen éxito. Algunos deciden hacer la voluntad del Padre y convertir sus sueños en metas mientras otros acarician su lástima propia.
No importa si va a jugar Barcelona, grabemos el juego para que podamos primero hacer la obra del Señor. Todo tiene su tiempo, pero nosotros debemos aprender a usar nuestro tiempo con prudencia y no malgastarlo.
La Biblia dice:
El que sabe contar sus días, sabrá contar sus bendiciones y por resultado obtendrá sabiduría para administrar su tiempo mejor cada día. Dios no hace acepción de personas, Él no destina a unos a tener éxito y ser ricos y a otros a fracasar y ser pobres. Todo eso depende de nuestras propias decisiones.
He aquí tres pasos para convertir nuestros sueños en planes los cuales se convertirán en metas:
1. ¿Qué es lo que quieres?
2. ¿Sabes cuánto cuesta?
3. Paga el precio.
¿Cuáles son tus sueños? De aquí a 5 años ¿dónde te ves? Ya no permitas que pase más tiempo, mira que los años parecen irse más rápido y el tiempo en esta tierra es corto. Tómate el rato para planificar, hacer, revisar y ajustar.
Planifica tus metas de corto, medio y largo plazo. Evalúa cuanto te costará alcanzar lo que quieres y comienza a hacer lo que primero necesitas hacer para cumplir con esas metas de corto plazo.
Tip: empieza con las metas de corto plazo para que puedas crecer en seguridad y confianza en tí mismo, porque si tratas de cumplir con metas de largo plazo primero, quizás te desanimarás por no ver resultados rápidos.
Después empieza a actuar y pagar el precio, revisa o evalúa tu avance en cuanto a tus metas.
Finalmente, ajusta lo que tengas que ajustar para progresar. Quizás mientras revisabas tu avance, miraste que podías cambiar ciertas acciones para poder trabajar más inteligente. Has lo que tengas que hacer, pero ya no pierdas más tiempo. ¡Tu puedes!
Piénsalo:
¿Cuáles son tus sueños?
De aquí a 5 años ¿dónde te ves?