Site icon Pastor Guillermo Jiménez

Levanta tu cruz

LEVANTA TU CRUZ

“Y todos los que, por seguirme, hayan dejado a su esposa y a sus hijos, a sus hermanos o a sus hermanas, a su padre o a su madre, su casa o un terreno, recibirán cien veces más de lo que dejaron, y tendrán además vida eterna” (Mateo 19:29 TLA).

No hay ningún otro lugar más que en la familia o en el matrimonio donde verdaderamente se puede ver si uno ha muerto al yo, o no. En la Iglesia en general no hablan mucho de morir al viejo hombre porque no quieren ofender a las personas. No se habla del sacrificio, ni el compromiso cuando lo que la gente necesita es ser desafiada a fin de que puedan cumplir con el propósito de Dios para sus vidas.

Nuestro yo siempre va a querer más gratificación instantánea y menos compromiso y disciplina. Hoy en día todo mundo quiere recibir un evangelio “light” o un servicio “light”, pero no quieren ser retados a cambiar, levantar su cruz y seguir a Jesús.

La Biblia dice, “Luego Jesús les dijo a sus discípulos: Si ustedes quieren ser mis discípulos, tienen que olvidarse de hacer su propia voluntad. Tienen que estar dispuestos a cargar su cruz y a hacer lo que yo les diga” (Mateo 16:24 TLA).

Seguir a Jesús de todo corazón requiere un costo y eso es lo que representa levantar tu cruz y seguirlo. Hay cosas y personas que tendrás que soltar para poder seguir a Jesús y cumplir con su voluntad para tu vida. Jesús dijo, “… tienen que olvidarse de hacer su propia voluntad…” (Mateo 16:24 TLA).

No somos dueños de nuestra propia vida, desde antes de la fundación del mundo, Dios nos hizo para cumplir con su perfecta voluntad. Es por eso que aunque alcancemos muchos logros o muchos títulos, o aunque tengamos todo el dinero, la fama y el poder del mundo, al final nos sentiremos insatisfechos, porque fuimos hechos para cumplir con la voluntad del Padre Celestial, no la nuestra.

Somos hijos de Dios, no esclavos de nuestra naturaleza pecaminosa. Fuimos hechos para servir a Dios con nuestros talentos, dones, habilidades, carreras, dinero, tiempo, y energía; nacimos para esto. Es cierto que este camino no es fácil pero la Biblia dice:

“Y todos los que, por seguirme, hayan dejado a su esposa y a sus hijos, a sus hermanos o a sus hermanas, a su padre o a su madre, su casa o un terreno, recibirán cien veces más de lo que dejaron, y tendrán además vida eterna” (Mateo 19:29 TLA).

Piénsalo:

¿Cuál es el precio que necesitas pagar para cumplir con la voluntad de Dios?
¿Qué significa levantar tu cruz?

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