La humildad

LA HUMILDAD

“El Señor sostiene a los humildes, pero derriba a los perversos y los hace morder el polvo”(Salmos 147:6 NTV).

La humildad no es ser alguien que piensa menos de uno mismo, sino ser alguien que piensa menos en uno mismo. Esta en nuestra naturaleza pecaminosa satisfacer nuestro ego y buscar lo que nos beneficia en lugar de lo que es mejor para los demás o lo que le agrada a Dios.

Unas de las cosas que Dios más odia son los ojos arrogantes.  La Biblia dice:

“Hay seis cosas que el Señor odia, no, son siete las que detesta: los ojos arrogantes…” (Proverbios 6:16-17 NTV).

El orgullo es el único espíritu que Dios mismo dice en Su Palabra que Él resiste. Dios pelea contra el espíritu de arrogancia porque va contra Su carácter de humildad. La Biblia dice que Él se opone al orgulloso, pero da gracia al humilde (Santiago 4:6 NTV).

Por lo tanto, la humildad solamente la podemos desarrollar con la ayuda del Espíritu Santo, porque la humildad es un fruto del Espíritu de Dios. “En cambio, la clase de fruto que el Espíritu Santo produce en nuestra vida es: amor, alegría, paz, paciencia, gentileza, bondad, fidelidad,humildad y control propio” (Gálatas 5:22-23 NTV).

La humildad nos lleva a depender de Dios y a no ser autosuficientes. La humildad nos lleva a tener una intimidad con el Padre Celestial y a entender que no podemos vivir esta vida sin Él. Nuestra confianza no debe de estar en nuestras fuerzas ni en nuestra sabiduría humana, sino en la fuerza de nuestro Señor.

La Palabra dice que Dios:

…“no se complace en la fuerza del caballo ni en el poder del ser humano. No, el Señor se deleita en los que le temen, en los que ponen su esperanza en Su amor inagotable” (Salmos 147:10-11 NTV).

Hoy en fe para tu día te exhorto a que desarrolles una intimidad genuina con Dios y que le pidas al Espíritu Santo que te ayude a ser humilde para que siempre tengas Su respaldo en todo lo que hagas.

“El Señor sostiene a los humildes, pero derriba a los perversos y los hace morder el polvo” (Salmos 147:6 NTV).

Piénsalo:
¿En qué o quién dependes todos los días?
¿Cómo puedes empezar a desarrollar la humildad?Ancla