DISTINGUIR ENTRE LO BUENO Y LO MALO
Es importante que los líderes tengan sabiduría. Las personas que estamos en lugares de influencia debemos saber distinguir entre lo bueno y lo malo porque hay gente que está mirando nuestro proceder para imitarnos.
Por ejemplo, los líderes de Águilas CFC. hemos decidido abstenernos totalmente de consumir bebidas alcohólicas. No es nuestro lugar condenar a otras congregaciones que piensan diferente, pero nosotros hemos discernido que ningún alcohólico comenzó siendo alcohólico, sino que todos empezaron con la copa social, con frases como “una no hace daño”, “una no es ninguna”, etc.
Aunque puse un ejemplo de líderes en la iglesia, quiero ahora mencionar que todos somos influyentes en algún lugar y debemos saber distinguir entre lo bueno y lo malo.
Si un padre en el hogar da la impresión de que no hay nada de malo en tomar alcohol, en robar y hacer negocios sucios, o en tener relaciones sexuales fuera del matrimonio, o en tener cualquier otro vicio, entonces los hijos y generaciones futuras lo verán también como algo normal.
Pero cuando el líder en el hogar considera como algo bueno el temer a Dios, decidirá adoptar buenos valores como la integridad, el respeto, el temor de Dios, el servicio, etc. y eso inspirará al resto de su familia a hacer lo mismo.
Piénsalo:
¿Qué área de influencia Dios te ha confiado?
¿Estás siendo un ejemplo a seguir para tu familia o personas bajo de ti en alguna área?
¿Qué valores te rigen?