Cuando las cosas se salen de control – II

CUANDO LAS COSAS SE SALEN DE CONTROL
Parte 2

 …Cuando David y sus hombres llegaron a su casa en la ciudad de Siclag, encontraron que los amalecitas… habían destruido Siclag y la habían quemado hasta reducirla a cenizas. Se habían llevado a las mujeres y a los niños y a todos los demás, pero sin matar a nadie (1 Samuel 30:1-3-2 NTV) 

David enfrentó una crisis porque secuestraron a su familia, pero él nos dejó un gran ejemplo de cómo actuar en medio de las crisis. Ayer aprendimos tres cosas y hoy aprenderemos otras tres.

En la crisis debemos:

1. Fortalecernos en Dios. No en el alcohol, en la droga, trabajo excesivo, o en el compadre. Aunque haya una crisis en el hogar, el líder debe ir a Dios (el esposo). Fortalecerse en Dios.  Juntos nos fortalecemos en Dios. Necesitamos aprender que nadie puede llenarnos más que Dios y debemos fortalecernos en el Señor.

Pero David encontró fuerzas en el Señor su Dios. (1 Samuel 30:6 NTV)

2. Dejar que Dios convierta a tus enemigos en tus aliados. David pudo haber matado al egipcio, porque él era parte de los secuestradores, pero fue sabio y lo alimentó para que él les dijera dónde estaba su familia.  Dios usó a este egipcio para darle la Victoria a David.

Cuando tú no peleas, Dios pelea por ti. De esa manera no pierdes tu reputación, ni tu bendición.

 —¿Me guiarás a esa banda de saqueadores? —preguntó David. El joven contestó: —Si haces un juramento en el nombre de Dios que no me matarás ni me devolverás a mi amo, entonces te guiaré a ellos. (1 Samuel 30:15 NTV) 

3. Consultar a Dios. Hay gente que consulta a todo mundo, menos a Dios. La gente suele consultar sólo a sus emociones, y toman malas decisiones por no consultar a Dios. David consultó a Dios y recuperó todo lo perdido y aún más

… y David le preguntó al Señor: —¿Debo perseguir a esta banda de saqueadores? ¿Los atraparé? Y el Señor le dijo: —Sí, persíguelos. Recuperarás todo lo que te han quitado. (1 Samuel 30:8 NTV)
Así que David recuperó todo lo que los amalecitas habían tomado y rescató a sus dos esposas. No faltaba nada: fuera grande o pequeño, hijo o hija, ni ninguna otra cosa que se habían llevado. David regresó con todo (1 Samuel 30:18 NTV)

Piénsalo:

¿Estás pasando alguna crisis?
¿De qué manera te ayuda el llorar un poco con alguien?
¿Has perdido el control en medio de una crisis? ¿Mejoró o empeoró el problema?