NO TERMINARÉ POR LA CARNE
He visto gente que parecía bien espiritual, pero de pronto se transformaron, inexplicablemente se volvieron a la antigua forma de vivir carnal y vulgar. ¿Qué les pasó?
Señor, ayúdame a terminar bien la carrera de la vida, a siempre depender del Espíritu y no de mis propias fuerzas. (Gal. 5:22)
Ayúdame para que nunca tome a la ligera tu gracia y tu unción, para que nunca vuelva a mi antigua forma de vivir conforme a los de deseos de la carne.
Quiero siempre depender de la ayuda de tu Santo Espíritu para que Tú sigas perfeccionando tu obra en mí y que yo pueda terminar en victoria sin volver a la carne hasta el día de tu venida.
¿Tan necios son? ¿Comenzaron por el Espíritu, y ahora van a acabar por la carne? (Gálatas 3:3 RVC)
Piénsalo:
¿Dependes del Espíritu Santo o de tus propias fuerzas?
¿Has estado tentado a volver a atrás?
¿Qué puedes hacer para mantenerte dependiendo del Espíritu Santo?