¿A QUIÉN ADORAS?
Cuando tú adoras a alguien se te nota. Ejemplo, Si tú adoras el deporte se te notará. No es malo, pero no hay que adorarlo, debemos adorar sólo a Dios. Cuando tú adoras a Dios, entonces oras y lees Su Palabra; oyes lo que Él está hablando, y Su Espíritu Santo te llena de paz, gozo, fe, etc.
En este tiempo se han cancelado los deportes, olimpiadas, etc. Dios quiere que la gente aprenda que esas cosas son buenas, pero que no se deben de adorar, y quiere que tengamos tiempos de quietud y que volvamos una vez más a Dios, que busquemos al Espíritu Santo y lo conozcamos como persona.
El alejarnos nos ha afectado como seres humanos porque fuimos hechos para ser relacionales, fuimos hechos para estar cerca de otras personas, y ahora que estamos separados por las regulaciones del gobierno y de los médicos para vencer este virus, mucha gente está sufriendo el síndrome del aislamiento, se sienten nerviosos, enojones, gruñones, peleoneros, impacientes, irritables, tristes; pues se les ha movido la vida, es natural, no fuimos hechos para estar solos.
El aislamiento el enemigo lo quiere usar, pero te tengo buenas noticias, aunque estamos aislados de las personas hay una persona que nunca te dejará, no necesitas venir al templo para tener a esa persona, esa persona es Dios, es Jesucristo mismo, y ahora se manifiesta a través del Espíritu Santo y todas las mañanas al despertar tú puedes decirle buenos días Espíritu Santo, y cada noche puedes decirle: “Aquí estoy”, puedes adorarlo y Él te llenará de Sus frutos.
Piénsalo:
¿Qué ocupaba el primer lugar en tu vida antes de esta crisis? ¿Trabajo, deportes, etc.?
¿De qué manera te ha afectado el aislamiento?
¿Has tomado tiempos de quietud para buscar más a Dios y llenarte de Su Espíritu Santo?
¿De qué manera te ha ayudado hacerlo?