ME CONVIENE CONSULTAR A DIOS
Después de esto, David le preguntó al SEÑOR:—¿Debo regresar a alguna de las ciudades de Judá?—Sí —respondió el SEÑOR.—¿A qué ciudad debo ir? —preguntó David.—A Hebrón —contestó el SEÑOR. (2 Samuel 2:1NTV)
Me llama la atención que después de que David hace estas preguntas a Dios, poco tiempo después fue ungido como rey. Es decir, consultar a Dios y obedecer sus instrucciones nos guían a momentos de unción, de influencia, y de victorias.
Señor, no quiero ser como los necios que se estrellan en la vida por ignorar tus direcciones.
El avisado ve el mal y se esconde; Mas los simples pasan y reciben el daño. (Prov. 22:3 RV60)
Señor, quiero ser como David, el hombre conforme al corazón de Dios.
Dame instrucciones claras. No quiero salir de esta crisis de coronavirus siendo el mismo hombre.
Quiero hacer tu voluntad, me conviene hacer tu voluntad, me complace hacer tu voluntad. (Salmos 40:8)
Piénsalo:
¿Consultas a Dios antes de tomar alguna decisión?
¿Por qué crees que es importante consultar a Dios y pedirle guianza?
¿Qué consecuencias has tenido por tomar decisiones a la ligera sin consultar a Dios?