Site icon Pastor Guillermo Jiménez

Hasta que ya no se podía hacer nada

HASTA QUE YA NO SE PODÍA HACER NADA

Se burlaron con desprecio de los profetas hasta que el enojo del SEÑOR no pudo ser contenido y ya no se podía hacer nada. (2 Crónicas 36:16b NTV)

Muchas veces Dios nos está advirtiendo de las consecuencias que tendríamos los seres humanos si continuamos ciertas conductas, pero lo ignoramos.

Cuando insistimos en aferrarnos a nuestros malos hábitos llega un punto en que ya no se puede hacer nada.

Nos aferramos a nuestras viejas formas de pensar, debilidades de temperamento, y pensamientos destructivos; hasta llegar al punto donde se pierden familias, empleos, ministerios, privilegios y hasta la unción, como en el caso de Sansón.

Entonces le gritó: «¡Sansón, los filisteos te van a atacar!» Y cuando Sansón despertó, creyó que podría escapar como en otras ocasiones, pero no sabía que el Señor ya se había apartado de Él. (Jueces 16:20 RVC)

Piénsalo:

¿Has ignorado las advertencias de Dios?
¿A qué malos hábitos o formas de pensar te has aferrado?
¿Qué has perdido a causa de eso?

Exit mobile version