No quiero ser terreno rocoso

NO QUIERO SER TERRENO ROCOSO

Las semillas sobre la tierra rocosa representan a los que oyen el mensaje y de inmediato lo reciben con alegría; pero… (Marcos 4:16 NTV)

En estos tiempos se está viendo qué tipo de terreno somos cada uno de nosotros sobre el cual la Palabra de Dios ha sido sembrada.

Algunas personas mostraban felicidad cuando estaban en la iglesia, pero solo tenían una relación superficial con Dios. Ahora que han llegado los problemas y la presión de esta crisis, se está manifestando que no tenían raíces profundas, que no tenían convicciones fuertes. Se están secando bajo el calor de las dificultades.

Las semillas sobre la tierra rocosa representan a los que oyen el mensaje y de inmediato lo reciben con alegría; pero como no tienen raíces profundas, no duran mucho. En cuanto tienen problemas o son perseguidos por creer la palabra de Dios, caen. (Marcos 4:16 NTV)

Pero hay otros que han revelado que siempre han sido buena tierra y siguen dando fruto, sirviendo a Dios a través de servir a las personas. Siguen practicando los seis hábitos del discípulo de éxito. Siguen dando fruto en la vida espiritual familiar, social y financiera.

Y las semillas que cayeron en la buena tierra representan a los que oyen y aceptan la palabra de Dios, ¡y producen una cosecha treinta, sesenta y hasta cien veces más numerosa de lo que se había sembrado!». (Marcos 4:20NTV)

Piénsalo:

¿Qué tipo de terreno eres tú?
¿Te has apartado del propósito de Dios por los problemas o has seguido dando fruto en todas las áreas de tu vida a pesar de la crisis?
¿Sigues practicando los hábitos del discípulo de éxito y sirviendo a Dios de alguna manera?