Cruzaré este lago

CRUZARÉ ESTE LAGO

Luego Jesús entró en la barca y comenzó a cruzar el lago con sus discípulos. (Mateo 8:23 NTV)

Tarde que temprano todos tenemos que cruzar en nuestra vida lagos peligrosos. Lo importante es que Jesús los cruce con nosotros.

En estos lagos encontraremos:
-Imprevistos
-Tormentas
-Cansancio
-Soledad porque estamos lejos de la gente
-Incertidumbre porque estamos lejos de la orilla y no hay amigos o edificios para protegernos
-Inseguridad porque se pierde la orientación si está nublado y no tenemos una brújula
-Ansiedad porque no tenemos señal de teléfono (No comunicación, no brújula, no Siri, no mapa, no FB, etc.)

Esta crisis ha sido como un lago que todavía estamos cruzando, y aunque no entendamos muchas cosas solo debemos asegurarnos de que Cristo sigue siendo el centro de nuestra vida.

Podemos perder el trabajo pero no podemos darnos el lujo de perder a Cristo.
Podemos perder amistades pero no a Cristo.
Podemos perder dinero pero no a nuestra fuente: Jesús.

Los discípulos fueron a despertarlo: —Señor, ¡sálvanos! ¡Nos vamos a ahogar! —gritaron. —¿Por qué tienen miedo? —preguntó Jesús—. ¡Tienen tan poca fe! Entonces se levantó y reprendió al viento y a las olas y, de repente, hubo una gran calma. (Mateo 8:25-26 (NTV)

Estoy seguro de que vamos a cruzar este lago de crisis porque Jesús va en nuestra barca, en mi familia, en mis finanzas, en el ministerio, etc.

Piénsalo:

¿Qué lago peligroso estás cruzando?
¿Qué has perdido en esta tormenta?
¿Te has asegurado de que Jesús esté en tu barca (en tu vida)?