UN DÍA SERÉ MÁS SEMEJANTE A ÉL
¡Qué bueno es saber que al fin un día podré despertar siendo más semejante a Jesucristo!
…estaré satisfecho cuando despierte a tu semejanza. (Salmos 17:15 RV60)
Por ahora, vivo en un mundo caído y soy tan imperfecto.
Por ahora, hago lo mejor que puedo y batallo con mi naturaleza humana.
Por ahora, dependo de su gracia, su misericordia y su amor incondicional.
Me siento amado y aceptado en Cristo.
Por ahora, solo es un deseo el ver a Dios cara a cara y parecerme mucho a Él.
Pero un día dormirá mi cuerpo.
Yo no le temo a lo que la gente llama “morir”. Para mí, solo es decir buenas noches a la vida temporal, y buenos días a mi verdadera vida.
En cuanto a mí, veré tu rostro en justicia; estaré satisfecho cuando despierte a tu semejanza. (Salmos 17:15 RV60)
Un día despertaré con un cuerpo glorificado que ya no estará sujeto a las leyes naturales ni a las debilidades de la carne.
Un día sentiré tanta satisfacción al despertar a su semejanza. ¡Yeeeyyyy!!
Piénsalo:
¿Le temes a la muerte?
¿Cuáles son tus mayores luchas?
¿Qué produce en ti el saber que a los que estamos en Cristo un día seremos más semejantes a Él y lo veremos cara a cara?