Dios los separó – parte 2

DIOS LOS SEPARÓ
Parte 2

Mientras iban caminando y conversando, de pronto apareció un carro de fuego, tirado por caballos de fuego. Pasó entre los dos hombres y los separó, y Elías fue llevado al cielo por un torbellino. (2 Reyes 2:11 NTV)

Ayer hablamos de que Dios hizo una separación entre Elías y Eliseo con un propósito: Con Elías fue llevárselo al cielo y a Eliseo dejarlo en la tierra como su sucesor. Fue una separación con propósito y de empoderamiento.

Fue una separación:

3. Planeada.  No fue a lo loco. Dios le había dicho antes a Elías que ungiera a Eliseo como su sucesor.

4. Preparada. Fue una separación preparada para el éxito. Elías entrenó, equipo, corrigió, y enseñó a su sucesor Elíseo.

5. Fue una separación hecha por Dios. No por una emoción o capricho humano, ni por un pecado de inmoralidad, ni por una discusión entre el mentor y el discípulo.

Mientras iban caminando y conversando, de pronto apareció un carro de fuego, tirado por caballos de fuego. Pasó entre los dos hombres y los separó, y Elías fue llevado al cielo por un torbellino. (2 Reyes 2:11 NTV)

No todas las separaciones son malas. Las separaciones humanas producen dolor, destrucción, retrasos, etc. Pero las separaciones hechas por Dios traen propósito, empoderamiento, edificación, gozo, fruto, sucesores, multiplicación, etc.

Piénsalo:

¿En qué situación has visto que una separación obró para bien?
¿Por qué crees que es importante preparar a un sucesor?
¿En quién has pensado multiplicarte?