SANTIDAD ABSOLUTA
Este pasaje se refiere a un edificio llamado templo, y dice que debe haber santidad absoluta en él.
Pero, recordemos que también nuestro cuerpo es llamado templo del Espíritu Santo, por lo tanto, también requiere que sea santo.
La santidad del cuerpo (templo del Espíritu Santo) habla de que este no debe ser usado para cosas como el adulterio, ni para borracheras, ni para consumir droga, ni ningún otro uso que no represente bien a Dios.
Es decir, debe ser apartado y dedicado para el uso de Dios. Por ejemplo, debe estar listo para que pueda fluir la unción por nuestras manos y ponerlas sobre los enfermos para que estos sanen.
Por eso, la importancia de vivir en santidad.
Piénsalo:
¿Cómo estás cuidado tu templo?
¿Representas bien a Dios?
¿Qué cambios necesitas hacer para vivir en santidad absoluta?
¿Estás siempre listo para fluir con la unción de Dios?
