No dejes las cosas a la mitad

NO DEJES LAS COSAS A LA MITAD

Vale más terminar algo que empezarlo. Vale más la paciencia que el orgullo. (Eclesiastés 7:8 NTV)

Tan importante es el animarte a comenzar algo, como el animarte a terminarlo y no dejarlo a la mitad.
Muchas personas se atoran en la vida porque son lentos y posponen las cosas, todo lo dejan para después.
Otros se atoran porque no terminan lo que comienzan.
Otros no tienen problema en comenzar rápido, son arrancados, no piensan las cosas, son arrebatados; pero son muy fluctuantes y dejan los proyectos a la mitad. Abandonan sus estudios a la mitad, se salen del matrimonio a la mitad, dejan de servir a Dios a la mitad, renuncian a sus sueños a la mitad, etc.

Es importante animarnos a comenzar proyectos. ¡Pero, igual de importante es animarnos para completar nuestros proyectos!

Vale más terminar algo que empezarlo. Vale más la paciencia que el orgullo. (Eclesiastés 7:8 NTV)

Piénsalo:
¿Qué has dejado a la mitad?
¿Qué has pospuesto para después?
¿En qué necesitas animarte para terminar lo que empezaste?