CUANDO NO ESTOY ALINEADO AL PROPÓSITO DE DIOS
Cuando me salgo de alineamiento con el propósito de Dios para mi vida, entonces, es fácil meterme en problemas y perder el gozo de vivir.
Esto le pasó a Jonás. Se sentía pésimamente cuando se desalineó.
Pero, cuando vuelvo a alinearme al propósito de Dios, entonces, también Dios me responde.
Desde la tierra de los muertos te llamé,¡y tú, SEÑOR, me escuchaste!
(Jonás 2:2NTV)
Cuando me vuelvo a alinear al propósito de Dios vuelve el gozo a mi vida.
Cuando me decido a cumplir las promesas que le había hecho a Dios para cumplir su propósito, entonces, salgo de la depresión, salgo de la panza del pez y vuelve el gozo; así como le pasó a Jonás.
Piénsalo:
¿Has perdido el gozo o te has sentido como en la panza de un pez como Jonás?
¿Estás alienado o desalineado al propósito de Dios?
¿Qué promesas le has hecho a Dios que necesitas cumplir?