¿QUÉ HAGO CUANDO LA VIDA ME ZARANDEA?
1.Confío que Jesucristo ha orado por mí.
…pero yo he rogado en oración por ti, Simón, para que tu fe no falle, de modo que cuando te arrepientas y vuelvas a mí fortalezcas a tus hermanos». (Lucas 22:32NTV)
2. Confío que Cristo intervendrá en los momentos del zarandeo.
Entonces, ¿quién nos condenará? Nadie, porque Cristo Jesús murió por nosotros y resucitó por nosotros, y está sentado en el lugar de honor, a la derecha de Dios, e intercede por nosotros. (Rom. 8:34 NTV)
3. Confío en que Dios no permitirá un zarandeo más fuerte del que pueda soportar.
Dios no permitirá más sufrimiento del que podamos sobrellevar.
Piénsalo:
¿Has sentido que tu vida es zarandeada?
¿De qué manera Dios ha intervenido por ti?
¿Qué produce en ti el saber que Dios siempre te mostrará una salida?