Debido a que amo – Parte 2

DEBIDO A QUE AMO
Parte 2

Debido a que amo a Sión, no me quedaré quieto.
Debido a que mi corazón suspira por Jerusalén, no puedo quedarme callado.
No dejaré de orar por ella hasta que su justicia resplandezca como el amanecer
y su salvación arda como una antorcha encendida. (Isaías 62:1 NTV)

De acuerdo con este pasaje, ayer aprendimos que cuando uno ama algo o a alguien no se puede quedar quieto ni callado, pero tambien….

3. Cuando uno ama a alguien o algo, uno ORA por eso.

No dejaré de orar por ella hasta que su justicia resplandezca como el amanecer y su salvación arda como una antorcha encendida. (Isaías 62:1 NTV)

Hay veces que uno quisiera hacerse indiferente a las necesidades y problemas del mundo, pero hay un fuego dentro de mí que no me lo permite. (como le sucedía a Jeremías).

Y dije: No me acordaré más de él, ni hablaré más en su nombre; no obstante, había en mi corazón como un fuego ardiente metido en mis huesos; traté de sufrirlo, y no pude. (Jeremías 20:9 RV60)

Aunque yo quisiera vivir mediocremente a la ligera, encuentro que no puedo hacerlo, porque he nacido con propósito.
Aunque quisiera ser indiferente a las necesidades de otros, me resulta difícil porque amo a Dios, porque amo mi familia, porque amo lo que Dios más ama: A las personas.

Debido a que amo…….No dejaré de orar por ella hasta que su justicia resplandezca como el amanecery su salvación arda como una antorcha encendida. (Isaías 62:1 NTV)

Piénsalo:
¿Te has sentido como Jeremías, con ese fuego interior que no te permite callar del amor de Dios?
¿Oras constantemente por lo que amas?
¿De qué manera estás cumpliendo el propósito de Dios en tu vida?