LA MISMA
Lo que sembramos hoy determina lo que cosecharemos mañana. Este principio aplica especialmente a los líderes, quienes tienen la responsabilidad de usar su influencia para el bien de los demás.
- Cuidado con lo que sembramos como líderes
“El rey y el príncipe” representan a los líderes, a todos aquellos que tienen el privilegio de dirigir un grupo, un equipo, o una organización. Ezequiel 7:27 nos advierte que Dios nos tratará de la misma manera en que tratamos a los demás. Es un llamado a reflexionar sobre cómo usamos nuestra influencia: ¿Sembramos justicia, bondad, y respeto o maldad y egoísmo? Lo que sembramos en los corazones de los que nos rodean, tarde o temprano, será lo que cosecharemos en nuestras propias vidas. - La misma medida con que midamos
Dios nos hace pasar por la misma maldad que hemos causado a otros. Es un principio inquebrantable de la vida: todo lo que sembramos, lo cosecharemos. Si tratamos a los demás con amor, dignidad, y respeto, Dios nos recompensará con lo mismo. Pero si sembramos maldad, esa maldad volverá a nosotros. Este es un recordatorio claro de que debemos cuidar cómo usamos nuestro poder e influencia. - Sembrar para cosechar sanidad
Nuestro deseo debe ser sembrar lo bueno: “Señor, dame la gracia para que este día pueda tratar a otros con dignidad, respeto, bondad, amor, y generosidad.” Queremos sembrar sanidad para cosechar sanidad en nuestras vidas y en nuestra comunidad. A través de la serie “Decisiones Que Sanan”, estamos sembrando cosas buenas en nuestra ciudad, confiando en que Dios, quien es justo, no olvidará nuestras buenas obras.
Piénsalo:
- ¿Cómo estás usando tu influencia como líder para sembrar justicia y bondad en los demás?
- ¿Qué acciones puedes tomar hoy para asegurarte de que estás sembrando lo que deseas cosechar mañana?
- ¿De qué manera puedes inspirar a otros a sembrar sanidad en sus vidas y comunidades?