VENCE TUS LEONES
“…. En otra ocasión, en un día de mucha nieve, Benaía persiguió a un león hasta un hoyo y lo mató” (1 Crónicas 11:22 NTV).
Si tú eres como yo y has visto un león de cerca, lo más probable es que fue en un zoológico donde el león estaba en una jaula tras unas rejas, y si eres una persona normal y sensata, de seguro que no intentaste meterte a comer o platicar con el león en su jaula. Lo normal es que cuando una persona se encuentra ante un león corra o se esconda en un lugar seguro para salvar su vida.
¿Te puedes imaginar a este hombre con valentía persiguiendo a un león? Esto me hace pensar en los leones que en la vida que necesitamos enfrentar, es decir, los grandes sueños de Dios, los grandes proyectos, o aún los temores o traumas de la vida que a veces cargamos y nos impiden tener éxito.
“…un valiente guerrero de Cabseel, quien hizo muchas proezas heróicas, entre ellas mató a dos campeones de Moab. En otra ocasión, en un día de mucha nieve, Benaía persiguió a un león hasta un hoyo y lo mató” (1 Crónicas 11:22 NTV).
Necesitamos atrevernos a perseguir esos leones.
Atrévete a hacer cosas grandes.
Si tus sueños son basados en tu lógica y los puedes realizar fácilmente con tus propias habilidades, entonces posiblemente no son lo suficientemente grandes.
Los proyectos de Dios son aquellos que nos asustan y pensamos “Wow, más vale que Dios me ayude con esto porque de otra manera estoy destinado a fracasar. La única forma en que yo podría lograrlo es que Dios intervenga sobrenaturalmente”. Estos son los tipos de sueños que debes esforzarte a alcanzar con el Señor a tu lado. También, estos tipos de temores son aquellos que Dios usará para hacerte más valiente y mostrarte que eres más que vencedor.
Piénsalo:
¿Qué leones necesitas perseguir o vencer?
¿Qué sueños habías pospuesto por temor al fracaso?