La obediencia abre puertas

LA OBEDIENCIA ABRE PUERTAS

Yo conozco tus obras; he aquí, he puesto delante de ti una puerta abierta, la cual nadie puede cerrar; porque aunque tienes poca fuerza, has guardado mi palabra, y no has negado mi nombre. (Apocalipsis 3:8 RV60)

¿Cuántas veces has estado esperando que se abra una puerta de bendición a tu vida y no se ha abierto? La clave para que Dios abra puertas son:

1. Sigue haciendo buenas obras. No te canses de hacer el bien. Quizás a veces te has desanimado por todo lo que haces por otros y no has visto resultados, pero recuerda que la recompensa no viene de los hombres, sino de Dios. Sigue haciendo buenas obras que Dios te abrirá puertas que nadie podrá cerrar.

No nos cansemos de hacer el bien, porque a su debido tiempo cosecharemos si no nos damos por vencidos (Gálatas 6:9 NVI)

2. Sigue guardando Su Palabra.
A José después de 13 años se le abrió la puerta grande del palacio. (Gen. 41:46)
Porque a pesar de todos los obstáculos que José atravesó en su vida, él no se desanimó y se mantuvo en obediencia a Dios.

3. Acepta Cristo porque Él es la puerta.  Deja que Él sea tu Señor y tu Salvador, entrégale tu corazón, pues Él quiere darte una vida de abundancia.

Yo soy la puerta; el que por mí entrare, será salvo; y entrará, y saldrá, y hallará pastos. El ladrón no viene sino para hurtar y matar y destruir; yo he venido para que tengan vida, y para que la tengan en abundancia. (Juan 10:9-10 RV60)
Yo conozco tus obras; he aquí, he puesto delante de ti una puerta abierta, la cual nadie puede cerrar; porque, aunque tienes poca fuerza, has guardado mi palabra, y no has negado mi nombre. (Apocalipsis 3:8 RV60)

Piénsalo:

¿Qué puerta estás esperando que se te abra?
¿Crees que es importante leer la Palabra de Dios diariamente? ¿Qué plan de acción te harás para lograrlo?
¿Ya aceptaste a Jesús como tu Señor y Salvador?