¿CÓMO ENFRENTAS LAS DESILUSIONES?
La desilusión es la pérdida de la esperanza, de los anhelos e ilusiones. Es el desengaño, la decepción, sentimientos que las personas tienen cuando no se cumplen las expectativas que tenían por algo o alguien, sentimientos de tristeza cuando alguien ha violado la confianza que le diste, etc.
La esperanza que no se cumple se convierte en un tormento para la persona y el tormento del corazón puede traerte enfermedades físicas y emocionales. Todo comienza con una decepción.
Además de todo esto, protéjanse con el escudo de la fe, para que puedan apagar todas las flechas incendiarias del maligno. (Efesios 6:16 RVC)
El diablo quiere incendiar nuestra vida enviando flechas de fuego y una de esas flechas son las desilusiones. Alguien te va a fallar, es inevitable y él quiere que te desestabilices emocionalmente.
Mientras el diablo quiere destruirnos por las desilusiones, quiere desgastar nuestras fuerzas para volvernos irrelevantes en este mundo quiere traer muerte a nuestras vidas, muerte a nuestros sueños, muerte a nuestra fe, a nuestro propósito, etc. pero Jesús vino a darnos vida y nos dejó Su paz para que nuestro corazón no sea turbado. Debemos pararnos enfrente de las desilusiones y decir: “no voy a dejar que me robes mi propósito”.
Piénsalo:
¿Has puesto expectativas en alguien o en algo?
¿Has dejado que las desilusiones maten tus sueños, tu fe y tu salud?
¿Has puesto tu mirada en Jesús para que cuando venga la desilusión no mueran tus anhelos ni tu propósito?