Mostrando la bondad de Dios

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MOSTRANDO LA BONDAD DE DIOS

El rey preguntó: «¿Queda algún descendiente de Saúl, a quien yo pueda darle muestras de bondad en nombre del Señor?» Y Siba respondió al rey: Aún ha quedado un hijo de Jonatán, lisiado de los pies. (2 Samuel 9:3 RVC)

El rey David mostró la bondad de Dios a Mefiboset, hijo de su gran amigo fallecido Jonatán. Mefiboset estaba lisiado de los pies, y nunca se imaginó que el rey lo mandaría a llamar para bendecirlo financieramente, dándole propiedades e incluso sentarlo a comer a su mesa todos los días como si fuera su propio hijo. ¡Me imagino que su vida no volvió a ser la misma!

—¡No tengas miedo! —le dijo David—, mi intención es mostrarte mi bondad por lo que le prometí a tu padre, Jonatán. Te daré todas las propiedades que pertenecían a tu abuelo Saúl, y comerás aquí conmigo, a la mesa del rey. (2 Samuel 9:7 NTV)

Dios también nos ha mostrado Su bondad a través de personas que Él ha puesto para bendecirnos, para que también nosotros podamos hacerlo con otros que están pasando situaciones difíciles o que sienten que Dios se ha olvidado de ellos.

Señor úsame para hacer sentir a alguien como príncipe, así como el rey David hizo sentir a Mefiboset.

El rey preguntó: «¿Queda algún descendiente de Saúl, a quien yo pueda darle muestras de bondad en nombre del Señor?» Y Siba respondió al rey: Aún ha quedado un hijo de Jonatán, lisiado de los pies. (2 Samuel 9:3 RVC)

Piénsalo:

¿Alguien hizo algo por ti en los momentos más difíciles de tu vida?
¿Qué puedes hacer por alguien que en este día necesita ver que Dios no se ha olvidado de él o ella?
¿Cómo puedes bendecirle y mostrarle el cuidado y la bondad de Dios?