NO ES POR FUERZA
Los grandes proyectos se logran por la ayuda de Dios.
Se pueden levantar grandes empresas con la fuerza y la determinación del ser humano, pero no permanecerán. Las grandes obras que permanecen y dejan un legado son aquellas en las que el Espíritu de Dios está envuelto.
En todo lo que hagas depende de Dios, pídele ayuda al Espíritu Santo para que tengas éxito, pídele sabiduría y guianza. No dejes a Dios a un lado de tus proyectos, de tus metas, de tu matrimonio, de tus hijos, etc.
Piénsalo:
¿Estás luchando solo o dependes de Dios?
¿Has tomado en cuenta a Dios en tus metas?
¿Has puesto a Dios en el centro de tu matrimonio?