Distinguiendo entre lo bueno y lo malo

DISTINGUIENDO ENTRE LO BUENO Y LO MALO

Los sacerdotes deben enseñar a mi pueblo a distinguir entre lo divino y lo humano, y entre lo que es puro y lo que es impuro. (Ezequiel 44:23 TLA)

¿Será importante distinguir entre lo bueno y lo malo?

Hay cosas que hacemos humanamente en nuestras fuerzas, pero otras sobrenaturalmente en el poder de Dios.

Hay deseos que provienen de mi carne, como el deseo de venganza;
pero hay deseos que son producidos por Dios, como el amor, el perdón, la paciencia.

Debo recordar que todo me es lícito, pero no todo me conviene. Debo discernir entre lo humano y lo divino.

La vida está llena de decisiones, por eso, es importante que nos tomemos el tiempo para distinguir si es bueno o no, si le agrada a Dios o no, entonces tendremos más posibilidades de tener éxito.

Los sacerdotes deben enseñar a mi pueblo a distinguir entre lo divino y lo humano, y entre lo que es puro y lo que es impuro. (Ezequiel 44:23 TLA)

Piénsalo:

¿Te es fácil al hacer decisiones diarias, distinguir lo que proviene de Dios y lo que no?
¿Por qué crees que es importante saber distinguir?
¿Qué consecuencias tuviste por haber tomado una decisión sin haberte detenido a distinguir si era buena o no?