QUÉ HACER CON LOS QUE NO NOS PRESTAN ATENCIÓN
A veces nos frustramos con la gente que no comprende nuestra manera de vivir. Se burlan de nuestro estilo de vida porque siempre vamos a una Casa de Paz o a la iglesia a servir a otros, y se extrañan porque nuestras bromas ya no son vulgares.
Nos preguntamos ¿Por qué no pueden ver desde el mismo punto de vista? La respuesta es fácil…
Hay tres cosas que puedes hacer:
1. Mantente relevante.
Aunque has sido cristiano por mucho tiempo, no te vuelvas un religioso que habla con puros términos teológicos. Es importante saber comunicar la verdad de Dios tanto al cristiano, como al mundano.
Debes tener soluciones prácticas y mantenerte sensible a las necesidades cotidianas para que puedas conectar con las personas que no vienen a la iglesia.
2. Ámalos, aunque no te comprendan.
Cristo primero amó a los ladrones, las prostitutas y a los mal hablados, después estos se convirtieron.
3. Deja que el Espíritu Santo haga su trabajo.
Ámalos y explícales las cosas de manera relevante y práctica, y tarde que temprano el Espíritu Santo quitará la venda de sus ojos como lo hizo contigo y verán desde el mismo punto de vista.
Piénsalo:
¿Qué cosas puedes hacer con personas como tus amigos y seres queridos que todavía no conocen de Cristo?
¿Cuál clave puedes usar para invitar a alguien a la iglesia, la Casa de Paz?