NO PIERDAS DE VISTA QUIÉN ERES
La gente cuando está en crisis y no se cuida pierde de vista quiénes son, pierde de vista su propósito de Dios para su vida, comienzan a sentirse deprimidos.
Se sientan todo el día frente a la televisión, comiendo todo el día, y pierden su propósito. Algunos estudiantes que se sacaban puras A, si no se cuidan pueden bajar sus grados.
El problema es que cuando perdemos de vista quiénes somos en Cristo, tendemos a volver a los antiguos caminos, la mente regresa una vez más a aquellos pensamientos de destrucción. ¡Cuánta gente he visto que cae en la tentación! Están desgastados por el estrés y se llenan de tanta mala noticia, y comienzan a darle lugar a emociones tóxicas en su corazón.
Cuántos buenos cristianos he visto que se quitan su ropa de santidad y vuelven a los viejos caminos; jóvenes, adultos, hombres y mujeres los he visto sucumbir ante la presión de la crisis¡No debemos perder nuestra identidad!
No vuelvas por la presión de esta crisis a tus pecados pasados, no vuelvas al alcoholismo, no vuelvas al adulterio, brujería, fornicación, a tus antiguas adicciones. ¡No pierdas de vista quién eres en Cristo!
Ponte vestiduras de santidad, de fe, de Salvación, de realeza. Dios nos vistió para ser reyes y sacerdotes para ministrar en su presencia.
Pero ustedes son linaje escogido, real sacerdocio, nación santa, pueblo que pertenece a Dios, para que proclamen las obras maravillosas de aquel que los llamó de las tinieblas a su luz admirable. (1 Pedro 2:9 NVI)
Piénsalo:
¿Te has descuidado espiritualmente en este tiempo de crisis?
¿Qué vestiduras están viendo las personas en ti?
¿Qué estás haciendo durante esta crisis?