CORAZON TERCO
El corazón de piedra por naturaleza se inclina a las cosas temporales, a los deseos de los ojos, a los deseos de la carne y a la vanidad de esta vida. (1 Juan 2:16-17)
Quisiera decir que es fácil mantener un corazón tierno, sensible, y amante de las personas, pero la verdad es que ni nosotros mismos conocemos lo profundo de nuestro corazón. La Biblia dice que engañoso es el corazón más que todas las cosas. (Jer. 17:9-10)
A veces tratamos de hacer cosas buenas, pero en realidad nuestras motivaciones son inadecuadas porque tenemos complejos, temores, resentimientos, heridas en nuestro corazón, etc.
Reflexionemos un poco al respecto.
Piénsalo:
¿Hacia dónde se inclina tu corazón? ¿Hacia las cosas temporales o a las eternas?
¿Tu corazón es tierno o se ha endurecido?
¿Le has pedido a Dios que escudriñe tu corazón?