¿Ya cambió mi corazón de piedra?

¿YA CAMBIÓ MI CORAZÓN DE PIEDRA?

Les daré un corazón nuevo y pondré un espíritu nuevo dentro de ustedes. Les quitaré ese terco corazón de piedra y les daré un corazón tierno y receptivo. (Ezequiel 36:26NTV)

Estamos teniendo una oportunidad de examinar nuestro corazón.

La mayoría de nosotros nos habíamos envuelto en el trajín del materialismo, en el correr de la vida y en la persecución de los sueños. La consecuencia es que nuestro corazón había perdido la sensibilidad.

Muchas veces nos habíamos vuelto insensibles a la presencia de Dios y a las necesidades de otra gente.

Aprovechemos estos meses para reflexionar en lo que verdaderamente tiene valor, en lo que son las verdaderas riquezas; entre las cuales está Dios, la familia, y las personas.

Éstas son las cosas eternas y las verdaderas riquezas.
Aprovechemos este tiempo para que Dios nos quite el corazón de piedra y nos dé un corazón de carne, sensible y receptivo.

Os daré corazón nuevo…y quitaré de vuestra carne el corazón de piedra, y os daré un corazón de carne. (Ezequiel 36:26RV60)

Piénsalo:

¿Has examinado tu corazón?
¿Habías perdido la sensibilidad hacia Dios y hacia las personas?
¿Qué es lo que verdaderamente tiene valor para ti?
¿Ya cambió tu corazón de piedra por uno tierno?