¿QUÉ COSTUMBRES DEJAREMOS?
David comenzó esta costumbre de cantar con todo el pueblo dando gracias a Dios.
Hoy, algunas familias han dejado costumbres negativas de celebrar los días de fiesta en las casas y en los salones de fiesta con alcohol, reuniones donde sucede toda clase de inmoralidad y violencia.
Otras familias dejan costumbres de educación y animan a sus hijos que gradúen de la universidad.
Algunas familias dejan costumbres de ateísmo, pero otras de amor y servicio a Dios y a las personas.
Hay familias que dejan costumbres de personas tacañas y envidiosas, pero otras practican la generosidad.
Unas familias dejan legados de fracaso, vicios, violencia, ateísmo, divorcios, de brujería, etc. Dinora y yo queremos dejar un legado de éxito en la vida espiritual, familiar, social y financiera.
El rey David comenzó la costumbre de los cantos de gratitud con la gente.
Yo quiero dejar la “costumbre” de los seis hábitos del discípulo de éxito (Oración, Biblia, devocionales, congregarse, servir, generosidad)
Piénsalo:
¿Cuáles costumbres estás comenzando?
¿Qué tipo de legado quieres dejar en tus hijos y futuras generaciones?
¿Estás siendo un discípulo de éxito para ser ejemplo para tus hijos?