A veces Dios me rodea

A VECES DIOS ME RODEA
PERO OTRAS VECES NECESITO AMIGOS QUE ME RODEEN

…pero los creyentes lo rodearon, y él se levantó y regresó a la ciudad. Al día siguiente, salió junto con Bernabé hacia Derbe. (Hechos 14:20 NTV)

Todos en algún momento de nuestra vida nos hemos sentido apedreados por los problemas o circunstancias difíciles que atravesamos, y necesitamos ser rodeados para salir adelante.

Habrá ocasiones en que la gloria de Dios será la que nos proteja de las pedradas, así como sucedió en el caso de Esteban cuando lo estaban apedreando. Dios mismo lo llenó de su paz al permitirle ver su gloria y a Jesús.

 …pero Esteban, lleno del Espíritu Santo, fijó la mirada en el cielo, y vio la gloria de Dios y vio a Jesús de pie en el lugar de honor, a la derecha de Dios. (Hechos 7:55 NTV) 

Pero otras veces, necesitaremos que las personas que nos aman sean las que nos rodean cuando nos sentimos apedreados por la vida para poder levantarnos, como en el caso del apóstol Pablo.

 Apedrearon a Pablo y lo arrastraron fuera de la ciudad, pensando que estaba muerto; pero los creyentes lo rodearon, y él se levantó y regresó a la ciudad. Al día siguiente, salió junto con Bernabé hacia Derbe. (Hechos 14:19-20 NTV )

Piénsalo:
¿De qué manera te ha ayudado cuando en medio de los problemas sientes la presencia de Dios en tu vida?
¿Qué diferencia has sentido cuando te has sentido apedreado pero los que te aman te rodean con amor, oración y cuidados?
¿A qué persona conoces que quizá necesita que lo rodees?