DIOS LOS SEPARÓ
Parte 2
Ayer hablamos de que Dios hizo una separación entre Elías y Eliseo con un propósito: Con Elías fue llevárselo al cielo y a Eliseo dejarlo en la tierra como su sucesor. Fue una separación con propósito y de empoderamiento.
Fue una separación:
3. Planeada. No fue a lo loco. Dios le había dicho antes a Elías que ungiera a Eliseo como su sucesor.
4. Preparada. Fue una separación preparada para el éxito. Elías entrenó, equipo, corrigió, y enseñó a su sucesor Elíseo.
5. Fue una separación hecha por Dios. No por una emoción o capricho humano, ni por un pecado de inmoralidad, ni por una discusión entre el mentor y el discípulo.
No todas las separaciones son malas. Las separaciones humanas producen dolor, destrucción, retrasos, etc. Pero las separaciones hechas por Dios traen propósito, empoderamiento, edificación, gozo, fruto, sucesores, multiplicación, etc.
Piénsalo:
¿En qué situación has visto que una separación obró para bien?
¿Por qué crees que es importante preparar a un sucesor?
¿En quién has pensado multiplicarte?