ASÍGNALE A CADA HOMBRE POR NOMBRE
“Responsabilidad de todos es responsabilidad de nadie”.
Hay que tener claridad enla descripción de funciones para cada persona. Esto aplica tanto en el hogar, trabajo, iglesia, en el fútbol, etc.
Cuando no hay claridadse desperdician talentos, tiempo y energía; además de que causa frustración entre el equipo.
En este pasaje vemos que se tenían que transportar cortinas, postes, utensilios, mesas, etc. A cada hombre por nombre se le dio un encargo específico.
Piénsalo:
¿Qué te ha encargado Dios a ti por nombre?
¿Estás cumpliendo con tus funciones como líder en tu hogar y ministerio?
¿Tienes claridad en tus funciones en cada área que Dios te ha delegado?