NO TE QUEDES SOLO
POR NO SABER ESCUCHAR
Y viendo todo Israel que el rey no les había oído, respondió el pueblo al rey, diciendo: ¿Qué parte tenemos nosotros con David? No tenemos herencia en el hijo de Isaí. ¡Israel, cada uno a sus tiendas! ¡David, mira ahora por tu casa! Así se fue todo Israel a sus tiendas. (2 Crónicas 10:16 RV60)
Este rey se quedó solo porque no supo escuchar.
El líder sabio sabe escuchar a otros.
El líder sabio sabe que su función es servir a los demás y por eso le interesa conocer el sentir de los demás.
El líder sabio debe ser empático y comprensible con las personas antes de dirigir.
El líder sabio sabe discernir lo que la gente dice de parte de Dios y lo que no es de Dios.
El líder sabio hace decisiones.
En este caso el rey no fue sabio, pero, me deja un ejemplo de lo que no debo hacer y una lección para que yo sea un mejor líder.
Y viendo todo Israel que el rey no les había oído, respondió el pueblo al rey, diciendo: ¿Qué parte tenemos nosotros con David? No tenemos herencia en el hijo de Isaí. ¡Israel, cada uno a sus tiendas! ¡David, mira ahora por tu casa! Así se fue todo Israel a sus tiendas. (2 Crónicas 10:16 RV60)
Piénsalo:
¿Hablas más de lo que escuchas?
¿Eres empático con los demás?
¿En qué problemas te has metido por hablar antes de escuchar?
