ALINEADOS PARA PROSPERAR
Es la voluntad de Dios que nosotros seamos prosperados en todo lo que emprendamos. Por lo tanto, lo único que debemos hacer es obedecerle, porque la obediencia es lo que desata las bendiciones del cielo.
Pasos para permanecer alineados y prosperados:
1. Elimina las distracciones. Hay que determinarse en seleccionar las prioridades que nos llevarán al cumplir el propósito que Dios tiene para nosotros.
No siempre hay que correr tras todas las oportunidades que se nos presentan, porque ir tras todas ellas nos puede hacer perder de vista aquellas que eran nuestra prioridad. Hay que saber diferenciar aquellas cosas que son “urgentes” a aquellas que son “importantes”, para no perder tiempo.
2. No permitas que las críticas te desanimen. Cuando la gente tiene grandes sueños, no faltan personas negativas que critiquen esos sueños.
A Nehemías le aparecieron algunos personajes muy negativos con fuertes deseos de impedir que los muros fueran reedificados, pero él en lugar de detenerse a preocuparse por sus enemigos, no les prestó atención, ni se detuvo ante sus amenazas.
3. Asegúrate que estás haciendo lo que Dios desea que hagas. Cuando estamos seguros de que estamos haciendo la voluntad del Señor, nada nos mueve, estamos plantados, seguros, dispuestos a pelear por lo que ya se nos ha dado, venga lo que venga, seguimos adelante, no somos como las olas del mar que van y vienen, por lo contrario, somos constantes y no nos desanimamos fácilmente.
Piénsalo:
¿Cómo has estado obedeciendo a Dios? Recuerda que la obediencia a medias, no es obediencia.
¿Estás seguro de que estás haciendo la voluntad del Señor? ¿Cómo lo sabes?